Financiamiento de litigios en Bolivia: acceso a la justicia en un entorno desafiante
El financiamiento de litigios por terceros es una herramienta cada vez más utilizada a nivel global para facilitar el acceso a la justicia, especialmente en contextos donde los costos, la duración de los procesos o la asimetría entre las partes pueden desalentar incluso los reclamos más legítimos. En Bolivia, donde los procesos judiciales suelen ser extensos y complejos, este modelo representa una alternativa innovadora para empresas, particulares y abogados que buscan capital para hacer frente a litigios con sólidos fundamentos jurídicos y económicos.
Historia del third party funding en Bolivia
A diferencia de otras jurisdicciones más desarrolladas en esta materia, el third party funding en Bolivia es un fenómeno reciente. No existe una tradición consolidada ni una industria específica dedicada exclusivamente al financiamiento de litigios. Sin embargo, en los últimos años han comenzado a surgir experiencias aisladas, principalmente impulsadas desde el extranjero o a través de iniciativas regionales enfocadas en arbitrajes o litigios con componente internacional. Lo que sí existe en Bolivia —y ha preparado el terreno para el desarrollo del modelo— es una creciente conciencia sobre la necesidad de contar con soluciones financieras que permitan hacer frente a litigios prolongados o de alto costo. En este sentido, Loopa se posiciona como un actor pionero, trayendo al país un modelo probado en otras jurisdicciones y adaptándolo a la realidad local: alta litigiosidad, procesos lentos y necesidad de capital para sostener reclamos legítimos.
Marco legal: derecho continental y acuerdos entre partes
El sistema jurídico boliviano se enmarca en la tradición del derecho civil o continental, lo cual ofrece una base estable para el desarrollo del third party funding. En este contexto, los acuerdos entre particulares —incluyendo aquellos por los que un tercero financia un litigio a cambio de una parte del resultado— son válidos siempre que no contravengan el orden público ni los principios fundamentales del derecho nacional. La cesión de derechos litigiosos está permitida bajo el Código Civil boliviano, y es un mecanismo comúnmente utilizado, por ejemplo, en contextos de cobranzas o sucesiones. Esto permite estructurar contratos de financiación en los que el financiador puede recibir una parte del crédito litigioso como forma de recuperar su inversión. Además, aunque la figura de la quota litis (honorarios condicionados al éxito del caso) no está regulada expresamente, es una práctica cada vez más utilizada por abogados en litigios civiles y comerciales, lo que demuestra una evolución hacia modelos contractuales más flexibles y orientados a resultados. Así, el financiamiento ofrecido por Loopa se enmarca dentro de los principios generales del derecho boliviano, como la autonomía de la voluntad y la libertad contractual, lo cual brinda seguridad jurídica a las partes involucradas.
Aplicación en arbitraje: potencial en desarrollo
Bolivia no es aún un centro arbitral de gran volumen en comparación con otras jurisdicciones regionales, pero el arbitraje comercial ha tenido un crecimiento sostenido desde la promulgación de la Ley de Conciliación y Arbitraje (Ley N.º 708), en 2015. Esta norma reconoce expresamente la autonomía de las partes y la confidencialidad del proceso, dos elementos clave para la implementación del third party funding. La Cámara Nacional de Comercio, la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía y otras instituciones empresariales cuentan con centros arbitrales activos. En arbitrajes internacionales con sede en Bolivia o con partes bolivianas, la práctica de incluir financiadores como Loopa es plenamente viable, especialmente en disputas de alto valor que requieren recursos para sostener peritajes, audiencias y representación legal especializada. En este campo, Loopa ofrece no solo capital, sino también experiencia técnica para estructurar la estrategia financiera del caso y acompañar a las partes durante todo el proceso arbitral.
Aplicación en litigios judiciales: monetización en procesos prolongados
Los procesos judiciales en Bolivia, en especial en materia civil, comercial y administrativa, suelen ser extensos y complejos. En litigios contra el Estado o en reclamos con apelaciones múltiples, los plazos pueden superar fácilmente los cinco años. Esta situación representa un obstáculo importante para demandantes con necesidades urgentes de liquidez o con capacidad financiera limitada para sostener un litigio prolongado. En este contexto, Loopa propone una solución concreta: monetizar el reclamo. Esto significa anticipar parte del valor económico del litigio, permitiendo al demandante disponer de recursos antes de que finalice el juicio. Esta estrategia no solo reduce la presión financiera, sino que también fortalece la posición negociadora de la parte financiada, especialmente frente a deudores que utilizan tácticas dilatorias como mecanismo de defensa. En Bolivia, donde muchas empresas y particulares se ven forzados a abandonar sus reclamos por falta de recursos, el financiamiento de litigios se convierte en una herramienta de empoderamiento: una forma de hacer justicia más accesible y efectiva, incluso en un sistema con desafíos estructurales.
Conclusión: abrir el acceso a la justicia en Bolivia
Bolivia enfrenta retos importantes en materia de eficiencia judicial y acceso equitativo a la justicia. En este escenario, el financiamiento de litigios por terceros aparece como una herramienta legítima y necesaria para nivelar el campo de juego. Loopa, como fondo especializado y con experiencia internacional, trae al país una propuesta adaptada al marco legal local, al servicio de abogados, empresas y demandantes con reclamos sólidos pero sin capital disponible. Ya sea en arbitrajes en crecimiento, en disputas comerciales complejas o en litigios judiciales prolongados, el modelo de Loopa permite transformar un derecho en expectativa en un activo tangible, monetizable y con respaldo profesional. Porque ningún caso meritorio debería quedar sin respuesta por falta de recursos.
